Luego de conocer el Municipio más poblado de Italia., Roma.,su capital.,dónde la mayor concentración de bienes históricos y arquitectónicos del mundo,te rodean,.acompañan y se presentan sorpresivamente a cada paso,.deseaba encontrar un espacio de colores.,de libro de cuentos.que me hiciera vivirlo con gran intensidad!!!.
Así encontré al pintoresco TRASTEVERE.único barrio que sobrevivió a la época Medieval,separado de la gran ciudad de Roma,sólo por un río,.el Tíber,de allí su nombre...TRANS-TIBERIM...desde la época antigua.
En la Roma Imperial,.el gusto etrusco.dejó su paso.y así a Trastevere ..Fué el barrio más poblado de la ciudad.se dice que hasta Julio César,vivió en alguna de sus majestuosas construcciones.
Posteriormente, ocupado por Roma,para vigilar ambas márgenes del río, no se urbanizó,quedó con ruinas romanas..edificios renacentistas y palacios.Pobre, marginado y excluído de las grandes remodelaciones romanas.
Gracias a ello,conserva hoy, buena parte del trazado medieval,con estrechas y serpenteantes callecitas,que le dan su identidad.
Había llegado al paraíso deseado ,.sólo quedaba transitarlo sin apuro,.caminar por sus adoquinadas callejuelas.Detenerme frente a casas coloridas y floreadas...
sumergirme poco a poco en la magia del pasado,pero viviendo el presente...Respirar ese aire añejo y delicioso que invadía el ambiente, porque allí,no sólo quedaron,edificios históricos y atracciones culturales.como la joya arquitectónica de la Basílica Santa María in Trastevere construída sobre los restos
de una primitiva iglesia de época paleocristiana del Siglo II sino,la más pura esencia de vivir en esa Italia originaria. Sus trattorias., restaurantes, tiendas y artesanos, son los grandes embajadores del sabor de este barrio junto al Tíbere.
Quedé con el deseo cumplido el paseo sosegado el almuerzo de un plato de la mejor pasta, la bebida de una copa al anochecer,en alguna de sus diminutas plazas y con su gente. que la hace diferente ... enseñándonos mucho más de lo que parece.
Era imposible no quedarse con el recuerdo de esta postal de viejas fachadas ,de alegría permanente...de
aire bohemio, de olores y emociones dónde se rescatan fragmentos y estímulos de la cultura popular,de este barrio, Trastevere, a orillas del Tíber.
Liliana Clarisa Gavrieluk.